martes, 14 de octubre de 2014

Trastornos del aprendizaje (TA)


Son parte de los trastornos de inicio en la infancia y adolescencia. Los TA hacen referencia a déficits específicos y significativos del aprendizaje escolar y tienen unos criterios diagnósticos propios.

Constituyen un conjunto de trastornos frecuentes en la infancia, cerca de un 5% de la población global sufren de problemas para leer, escribir y hacer cálculos. Las personas con TA (trastornos de aprendizaje) presentan problemas persistentes y graves para asimilar determinados conceptos académicos. En otras palabras es la incapacidad persistente, inesperada y específica para adquirir de forma eficiente determinadas habilidades académicas (ya sea lectura, escritura, cálculo, dibujo, etc.), y que ocurren a pesar de que el niño tenga una inteligencia normal, siga una escolarización adecuada y su entorno socio-cultural sea favorable.

Suele aceptarse que los niños con TA han de tener un nivel cognitivo en rangos normales o altos. El problema de los niños con déficit cognitivo es distinto y, siendo estricto, no pertenece al campo de los TA. Sin embargo, se cree importante resaltar que cuanto mayor sea la capacidad cognitiva del niño, mejor podrá enfrentarse a un posible TA, es decir, desarrollará antes y mejor estrategias para superar problemas concretos generados por el trastorno.

Los trastornos de aprendizaje se clasifican en:
-Dislexia: es un trastorno del neurodesarrollo que genera problemas en el aprendizaje y el uso del lenguaje, la lectura y la escritura, se ven afectadas las áreas básicas de los procesos fonológicos y de decodificación de palabras aisladas. Es un trastorno familiar y hereditario, por lo que es un factor determinante de cara al diagnóstico.  Es más frecuente en varones. La dislexia no tiene cura pero es tratable. Existen subtipos de dislexia, los cuales son: la fonológica (problemas  con las sílabas), de superficie (problemas con la lectura léxica) y mixta.

-Discalculia: la discalculia del desarrollo es un TA que provoca que el niño tenga dificultad para la adquisición de habilidades matemáticas en niños con una inteligencia normal, estabilidad emocional y con una formación académica adecuada o estándar. Es un trastorno que afecta directamente la vida cotidiana ya que es complicado la interpretación de escalas de tiempo, direcciones, el manejo de recursos monetarios y hasta para cocinar (tiempos de cocción, etc.) En el niño, clínicamente se traduce por un fracaso en la adquisición de las operaciones matemáticas básicas, muy por detrás del grupo de su misma edad. En la adolescencia, muchos pacientes llegan a tener un aceptable uso de conceptos matemáticos sencillos. Afecta por igual a niños y niñas. Es un trastorno marcado por la herencia, aunque se considera que su origen es multifactorial. Al igual que sucede con la dislexia, la discalculia es un trastorno tratable pero no curable.

-Trastorno del aprendizaje no verbal: Tal vez es el trastorno menos conocido del TA, ya que aun está en investigación y evaluación por parte de los profesionales. En este trastorno el niño se caracteriza por presentar una alteración en la percepción táctil y visual, así como la motricidad (torpeza motora, mala coordinación), además dificultades para la adaptación de materiales o tareas novedosas. El perfil se completa con la presencia de una afectación de la memoria táctil y visual, problemas para la formación de conceptos y en la capacidad de resolución de problemas. También pueden presentar problemas del lenguaje.  Una de las causas puede deberse a la disfunción del hemisferio derecho como resultado de un daño o déficit funcional en las conexiones de la sustancia blanca.

Se requiere para el diagnostico de los TA una evaluación e intervención multidisciplinaria (pediatra, psicólogo y maestro). La identificación lo más temprana posible de los TA es esencial para su tratamiento también precoz, antes de que la escolarización esté muy afectada y se tenga importantes secuelas emocionales, pues entonces la efectividad del tratamiento será mucho menor. Es necesario el diagnóstico neuropsicológico y psicopedagógico, con el fin de determinar las necesidades del niño (a) y su tratamiento o plan remedial.

Es crucial apoyar al niño (a) en el proceso evolutivo del tratamiento, de igual manera ser comprensivos con su ritmo y necesidades. Ya que dependiendo del TA que presente se manifiestan algunas dificultados secundarias consecuencia de los mismos. Dichas dificultades académicas pueden potenciar la vulnerabilidad de estos estudiantes a manifestar otros problemas en áreas no académicas como la social (carencias en las habilidades sociales y de interacción social, relaciones conflictivas con personas significativas), personal (autoconcepto bajo), conductual (agresión, conducta antisocial). Por lo tanto, hay que tener en cuenta que entre un 25-50% de los niños con TA sufren problemas sociales, emocionales y conductuales a lo largo de su vida

Los profesionales deben aclarar a los padres que el TA es una condición de por vida y debe seguirles durante toda la niñez hasta la adolescencia. Pero recordarles que con buenos hábitos y rutinas cotidianas, aunado con el tratamiento, se puede lograr la prevención de progreso o gravedad de la condición. El papel de los padres en el aprendizaje escolar es fundamental. El estudio requiere tiempo y hábito. Los padres deben facilitar un lugar adecuado y deben enseñar al niño a tener sus cuadernos y libros en orden, manejar la agenda escolar, planificar las horas de estudio; deben estar disponibles, dar sensación al niño de que están para escucharle y ayudarle. Motivación y afecto son dos pilares fundamentales en el proceso de aprendizaje y los padres están en una posición privilegiada para ofrecer ambas cosas.

Licda. María Fernanda Prado Ocampo.
Psicóloga.
nanared10@gmail.com

1 comentario:

  1. Me parece que desarrolles el tema como un trastorno y no como un problema como muchos tienden a clasificarlo! Como lo expone Vasen (2008) en su libro Las Certezas Perdidas muchas personas tienden a determinar a un niño o niña a través de técnicas reduccionistas y no de un diagnóstico que abarque la complejidad de el/la estudiante. Como bien lo mencionas los trastornos de aprendizaje deben de ser desarrollados tanto por la familia, docentes y cuerpo de apoyo, a partir de diferentes estrategias y técnicas que respondan a las necesidades, destrezas y limitaciones, así como para potencializar sus habilidades y particularidades.

    ResponderBorrar